miércoles, 26 de septiembre de 2012

licuefacción ( o como joder lo que parecía ser un poema)

Cartier Bresson (1934)


en el fragor
de unos dedos que aprietan
el lápiz o
el desliz nocturno de los que no poseen la lluvia
cuanto más
ahondo en el barro
más ganas de las hostias sinceras de la poesía
  
y rebuznar salvaje
por entre
las piedras
guardando las caricias a los muertos

eso es precisamente la vida
equivocar la sangre
de su cauce
remar desnudo a contracorriente
en la barca anegada de nada
la soledad subida en su autogiro
la gasolina fosforescente de los gineceos      
cuando la sucia
hiena espera en la orilla
y espera
y desespera y ríe por no llorar

los objetos saben más de lo que crees
me digo
cuando elucubro y me ahogo en la fría pileta de los diccionarios     
una cartera vacía
un preservativo hecho grulla
por la lujuria de la papiroflexia     
una foto de un viejo guerrillero  
la cuchara sopera se mueve lasciva sobre la encimera
Lee Harvey Oswald titula “rigor mortis”
a su orgasmo a su poema cagado de luz       
los pelos de un arcángel sobre un bidé
la cinta de cassette
que gira del revés blasfema 
la muerte de todas las comadronas
y los pobres poetas
destetados un segundo antes del fin del mundo
sin sus tristes peines sin sus oleajes            
no hay carta de amor en el mundo
para alojar tanta desesperación…    

miércoles, 5 de septiembre de 2012

la desolación roja de los ratones

Fotografía de Saul Leiter.

después de mil años sin airear mi cuarto clandestino...  

tal vez necesite
un bar
donde
cambiar los pañales de esta muy tristeza inmaculada
una barra llena de migas y cervezas calientes
una “jukebox” legendaria
unos pocos seres con miedo en los pantalones
mirándose
los charcos
estáticos que crecen en la imaginación
es abisal el lenguaje
que me avisa de que invierno y recién nacido 
son coagulaciones tranquilas 
del lenguaje    

tres cuartas partes de mi
no contestan
se insubordinan
con ansias de morder
la ternura que reparten los carteros   

hay un huerto lleno de santos silenciosos
que ayunan
entre las flores y la roja desolación de los ratones
golpeo la puerta y nadie (me)
abre

la noche salvaje
las plegarias  
de un dios adolescente
que odia la causalidad desnuda de la muerte   

hay un huerto lleno de frío
golpeo la puerta
y nadie (me) abre…