lunes, 31 de enero de 2011

muriendo los inconexos

Fotograma de "Cléo de 5 á 7". Agnés Varda.

A menudo sueño con perros

con vientres hinchados de silencio

con la breve fantasmagoría

de una rueda bajando la montaña…

y me dices que mis libros de Kurt Vonnegut

abrasan

al gimnasta loco que muere

joven por el magnesio y la rutina

y los besos

todos ellos amontonados

bajo mi cama a la espera

de que alguien los saque a pasear

a deshora

por las calles de la ciudad.

Vagabundos

en sus crisálidas de orín y benzedrina.

y ya no me quedan ganas para

seguir siendo poeta

la poesía es un negocio turbio

donde me sangran

los aullidos

y a las paredes

las da por repeler mis cantos de lucha y esperanza…

lunes, 24 de enero de 2011

pseudo poesía bajo los efectos de la enajenación transitoria

"Los solitarios" Edvard Munch.

Y si dejamos que todo esto salte por los aires?

Vendrá la rabia sucinta

del que pierde la dignidad

cuando come una vez

de la mano del amo,

vendrá la corrupción lenta del estío

y no estaremos para calcular la devastación

que los besos producirán

en el jodido orden mundial,

vendrá la saliva

deflagrada

sobre los miércoles

que apestan a subsidio y llanto,

pondremos la primera piedra

de la casa que orbita

lejana y sola,

nos orinaremos

en la tapia sonámbula de la noche,

y cuando

bailes desnuda en la encrucijada de la lluvia,

vendrá el verso que cambie el mundo,

vendrá, claro que vendrá…


martes, 18 de enero de 2011

soñando

Fotograma de "Vivir". Akira Kurosawa



Se te antoja la noche
perra de costumbres fijas
con la luz apagada
con la barba calcinada por el deseo
con los pétalos negros
abiertos a la plaga lluviosa del amor
esta noche interminable
en el jardín abolido de nuestra juventud...



viernes, 7 de enero de 2011

bajo la superficie


Antónia Font. "Batiscafo Katiuscas"


Viajo en mi batiscafo

entre la oscuridad de las

estrellas rebeldes

que se niegan a refulgir.

Pequeñito, y consteladamente

trágico, desmesurado

en un dedal de luz.

La ternura por todas partes

se hace síncope azul,

un yugo de caballitos de mar

ahoga las acometidas

de la ola y me sobra el aire sucio de la calle.

En mi batiscafo, república

silenciosa de algas y besos,

rasco la barriga de una bestia abisal,

leo poesía a los ahogados

bajo una triste claraboya.

Los náufragos

me escribirán cartas de amor

a un millón de kilómetros de aquí…