jueves, 28 de agosto de 2008

¿Realidad o ficción?


Lunes. Suena el jodido despertador. Me levanto de la cama como un zombi recién salido de una peli de George A. Romero (muy de serie B). Y me meto bajo la ducha esperando que ocurra el milagro (mis pupilas vuelvan a montar los fotogramas de mi realidad con una cierta coherencia). Se acabaron los flash backs imprevisibles que se agolpaban hace unos minutos en el polvoriento tragaluz de mis sueños.


En la parada del autobús, las mismas caras. Pasan quince minutos de las ocho. Trataré de buscar un sitio atrás para poder devorar durante el trayecto un libro de Leopoldo María Panero, que de tanto abrirlo y cerrarlo, está apunto de desintegrarse en el relente . Un trayecto degustando hermosos poemas, saboreando los huesos y la locura que se le han ido desprendiendo al bueno de Panero a medida que se suceden las páginas. Sumido en mi propia Babilonia (repleta de vigilantes de seguridad) mientras me circunda la cárcel cotidiana de un día laborable más.


Miro al fondo del autobús. Allí como cada mañana, ELLA. Tres míseras paradas no separan. Creo que a estas alturas, la llamaré “Señorita fugacidad”. Sentada, con los ojos cansados y su pelo recogido. Antepenúltima parada. Sale gente, entra más gente. Callada, dejándose mecer por las magulladuras del asfalto. A su cuello van a parar las luces que se le van desprendiendo a la ciudad con la llegada del amanecer. Mientras un par de lunares juegan a saltar la verja que delimita su hermosura, y donde pone muy claro “Prohibido Pasar”. Penúltima parada.
Alguien dijo una vez “que la resignación es un suicidio cotidiano”. La belleza ha de contemplarse en todas sus formas. Una mano que se apoya en al aire y un dedo que invoca la urgencia de una “parada solicitada”. Una mirada luminosa sostenida por un enjambre de pájaros transparentes y que escruta los intestinos del autobús. Su manera de impacientarse sin saberlo, sus labios, todo corrobora la “teoría del caos”: Una mariposa juguetea entre su pelo, y al fondo del autobús (el otro extremo del mundo) un tornado asolará mi maltrecha imaginación…


Ahora sólo queda darle una mañana un papel con estas palabras o tal vez no. Entre toda una multitud apelotonada en el bus, acercarme y decirle: "Gracias por amedrentar mi cotidianeidad con el látigo dulce de tus ojos. Aquí tienes tu poema". No creo que tenga cojones…

miércoles, 27 de agosto de 2008

Anoche soñé con enjambres de lluvia

CORTÁZAR-EL APLASTAMIENTO DE LAS GOTAS.

Cada vez que escribo una palabra,

un pobre verso desnudo,

te plagio maestro...

viernes, 22 de agosto de 2008

FRAGMENTOS


Fragmentos. Mi vida es un paréntesis, un resplandor de rebeldía entre dos nadas, un “coitus interruptus” en medio de ninguna parte. No puedo ofreceros otra cosa que fragmentos. Fragmentos de un poema que tiene sus años, sucio y lustroso al mismo tiempo. Un poema que jamás me delatará, reinventándose, centrifungándose, volviéndose loco con el tacto de unos dedos que rezuman lujuria. A estas alturas, necesito de vosotros, QUE SOBREVOLAIS MI LLANURA CLANDESTINA.

" Para todos los que me leeis"
(...
Relincho loco y enamorado
en el mismo pozo
donde se ha arrojado la luna,
entre vidrios y pétalos rotos.
Debiste hacer caso a la gente
cuando trataron de disuadirte,
la vida con un humilde tramoyista del verso
conlleva sacrificios.
La realidad jamás nos cogerá vivos,
lo mejor será morir soñando.
Como en una vieja película francesa
que acaba con un beso en el mar,
esperaré el tiroteo
agazapado entre las flores,
robando versos a la intemperie.
La escena final
tendrá sangre y poesía,
y el vuelo expresionista de un gorrión
dibujará el aullido seco de tu deseo...)

martes, 19 de agosto de 2008

Ni uno más ni uno menos

23 canciones y un Jumbo despega repleto pasajeros.
La noche, las estrellas y un circo luminoso
debajo de la higuera.
23 palabras que se adormecen
por los efectos intravenosos del Vodka
jugueteando entre la nieve.
23 dudas
antes de darte un beso.
23 oraciones sin un dios
al que conectar el polígrafo
bajo las uñas de cristal.
La noche, las estrellas y un circo luminoso
debajo de la higuera.
23 gotas de lluvia
y un jumbo repleto de japoneses que agujerea las nubes.
Con la última turbulencia, un pasajero
sufre una combustión espontánea
(ocupaba el asiento número 23).
El relente que viaja con los pájaros
desconoce el protocolo de incendios.
23 versos que se van comiendo por los pies
a una noche negra de puntos suspensivos...

miércoles, 13 de agosto de 2008

CORTO Y CAMBIO


DELTA

Necesito silencio para poder seguir escribiendo,
es imprescindible la escritura y su tersa violencia.
Corto las comunicaciones con la Tierra.
Al otro lado se oye la tersa epidermis de la nada.
La estridencia es
la que mutila el significado del poema.
Y así no llegaré muy lejos,
con un poema inconcluso,
que gravita heroico y demente
por los conductos del aire acondicionado.
No lo olvides, no soy un poeta,
soy un impostor que plagia a Cortázar
en los patios vecinales de la estratosfera.
Todo está dicho. No hay nada nuevo
bajo el universo.
No queda una sólo lingüística por inventar,
no existe una renacida Babilonia por asolar...

miércoles, 6 de agosto de 2008

ÚLTIMO ALTERCADO


Allí donde no llegan las palabras
y solo malviven los ensueños,
nos quedan migajas de amor y de sexo,
para tratar de decir lo innombrable.
Dedícate a reventar el costado de la incomunicación
a base de tiernos derechazos
con forma de beso.
Cuando despiertes noqueado
en el cuadrilátero vacío,
no te molestes
en buscar su mirada entre el público,
ella nunca pudo soportar
la agónica levedad
de los perdedores...