jueves, 21 de julio de 2011

tal vez para siempre sea sin título

Fotografía de Henri Cartier- Bresson

Rimbaud me arranca el corazón
silencio y abismo
es inútil resistirse al silogismo que crece ilimitado
entre los manzanos

un escualo
en mi cuarto de baño
agoniza
sobre las baldosas 
y me siento a escuchar su historia.
su  tic tac su respiración apenas  
primero sordo luego ciego
después la sinrazón de otra naturaleza muerta

Me arranco las manos de papel
las yemas de los dedos
la herida
es un palomar en ruinas
a donde van a jugar a la pelota los sicarios…              

Me coso las vísceras al
vaivén de las amapolas
Y la herida grita estertores y caracolas
y sin corazón
palpito sobre el vuelo arcangélico
de las putas
a la hora en que las palabras
se masturban desnudas sobre la tierra…

sábado, 16 de julio de 2011

escritura(s)

Los malheridos- Alberto GArcía-Alix

El resuello moribundo de los amantes en el piso de arriba

Escribo.  Cuando en realidad quiero gritar
a los pájaros oscuros que anidan la tarde


cuando el amor entra en ignición
los jergones bostezan
caprichosos: no hay supervivientes

sabes que de ese lugar no se vuelve
no eres más que un montón de huesos y ternura
un setenta por ciento de agua y otro poco de incertidumbre
la patafísica la manera sombría de tomar café
de cuclillas en el rincón más indómito de la cocina      
una noche entera bebiendo coñac
para perpetrar otro poema
que se traviste de respuesta
cuando en realidad es una infinita pregunta…
 
El balbuceo del bebé gestado en las últimas palabras   
una y otra vez…
“Capitalism kills love”…

martes, 5 de julio de 2011

los que nunca supieron

  Foto:© Alberto García-Alix

dos empleados de banco que en una café
planean un atraco
dos empleados de banco
sueñan con martirizar mariposas
en los límites de la intemperie…
dos empleados de banco
que sacian sus ganas de follar
eyaculando tristeza   
sobre una cuaderna vía
dos empleados de banco y el principio de incertidumbre
dos empleados de banco y el alarido de una mosca en Bielorrusia
o la insustancial forma de decir  “no”
dos empleados de banco
jugando a ser Pessoa
en el “Martihno da Arcada”
borrachos y lúcidos
con el anhelo infinito de desaparecer
entre
el odio incandescente de los tranvías…